Las quemaduras son una lesión bastante común en la vida cotidiana. Nos podemos quemar las manos al tocar algún producto químico, la lengua al comer algo demasiado caliente… Pero ¿sabías que también se pueden sufrir quemaduras en los ojos? Aunque en general las heridas de esta índole suelen ser leves y no necesitan tratamiento médico; en el caso de las quemaduras oculares es importante actuar a tiempo para evitar consecuencias nefastas.
Los párpados son el mecanismo de defensa más eficaz que tenemos para proteger los ojos. Entre las pestañas y el movimiento reflejo del párpado cerrándose para evitar cualquier daño, lo habitual es que el ojo esté protegido de la mayoría de las lesiones. Aun así, a veces no hay manera de evitarlo y puede entrar una sustancia peligrosa.
Por eso, a continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre las quemaduras en los ojos, incluyendo las causas más frecuentes y qué hacer en cada caso, para que estés preparado si alguna vez te pasa.
Índice de contenidos
¿Cuáles son las causas más frecuentes de las quemaduras en los ojos?
Como con otro tipo de quemaduras, las de los ojos pueden estar causadas por diferentes elementos. Es importante tener claro cuál es el origen de la quemadura para poder tratarla correctamente, pues no todas las sustancias tienen el mismo efecto o gravedad y, por lo tanto, el procedimiento a seguir será diferente. Sí que hay una cuestión común a todas: la necesidad de actuar urgentemente para evitar un daño aún mayor.
Quemaduras químicas
Las quemaduras en los ojos por sustancias químicas son un accidente doméstico y laboral muy común.Tanto los productos de limpieza, como detergentes, lejías o blanqueadores como otras sustancias químicas presentes en determinados puestos de trabajo, son los causantes más habituales de las quemaduras químicas en los ojos.
Hay que tener en cuenta que este tipo de quemaduras en los ojos pueden estar producidas tanto por sustancias alcalinas como ácidas, y son el tipo de quemadura potencialmente más peligrosa. En concreto, las quemaduras con sustancias alcalinas suelen ser más graves y pueden producirse tan fácilmente como una salpicadura de sosa cáustica, limpiadores de horno, desatascadores, detergentes para lavavajillas, fertilizantes o productos de cal, hormigón, yeso o mortero. Este tipo de quemadura puede causar necrosis por licuefacción, pues tienen una penetración más profunda, mientras que las quemaduras ácidas generan necrosis por coagulación.
Quemaduras térmicas en los ojos
Las quemaduras térmicas suelen ser más leves que las químicas, y, en general, afectan más al párpado que al interior del ojo. En el caso de dañar a la zona de la conjuntiva o de la córnea, la herida es más superficial y suele cicatrizar y curar sin dejar secuelas significativas.
Tratamiento de las quemaduras en los ojos
Si se sufre cualquier quemadura en la zona ocular, es imprescindible acudir al médico con urgencia para una valoración de la gravedad de los daños y del tratamiento recomendado. Para empezar, se debe aclarar primero el tipo de la quemadura, pues de ello dependerá el proceso indicado.
En el caso de las quemaduras en los ojos por sustancias químicas, sean alcalinas o ácidas, es urgente iniciar el tratamiento cuanto antes, pues el daño puede ser realmente grave. Lo primero es lavar el ojo durante un mínimo de 30 minutos para quitar cualquier resto de la sustancia. Durante este proceso se puede anestesiar el ojo para ayudar al paciente y facilitar el tratamiento. A continuación, se deben revisar los fondos de saco conjuntivales para limpiar con un hisopo cualquier sustancia que pueda seguir ahí. Hecha esta limpieza, el profesional de oftalmología recomendará un tratamiento específico según la gravedad y el diagnóstico de la quemadura ocular.
Para las quemaduras térmicas, al ser más leves, el proceso suele ser más sencillo. Si se produce en el párpado, esta debe limpiarse con una solución fisiológica y un ungüento antimicrobiano para impedir infecciones. En el caso de que la herida sea en el interior del ojo, se suele recomendar un tratamiento a base de fármacos.
Secuelas que pueden dejar las quemaduras en los ojos
Las quemaduras más graves pueden llegar a generar incluso la pérdida de visión, pero otros síntomas previos son:
- Escozor y enrojecimiento de los ojos
- Gran irritación e inflamación del ojo
- Alta sensación de dolor
- Visión borrosa o pérdida paulatina de la visión
- Dificultad o imposibilidad de abrir el ojo
- Incomodidad y sensación de tener algún cuerpo externo en el globo ocular.
