La calima es un fenómeno meteorológico muy poco habitual en la península. Suele ocurrir de manera más frecuente en las Islas Canarias, sobre todo en las más orientales como Fuerteventura y Lanzarote y también en el sur de Gran Canaria y de la península.
El polvillo propio de la calima, que en España habitualmente proviene del desierto de Sahara, tiene efectos para la salud ocular. En los ojos, se mezcla con la película lagrimal que protege la superficie ocular y por ello, se puede notar sensación de arenilla después de un paseo por la calle. Las personas con sequedad ocular notarán de forma más intensa este fenómeno.
Índice de contenidos
¿Qué es la calima?
Este fenómeno meteorológico está caracterizado por la presencia de partículas de polvo y arena en suspensión, aunque la calima también se puede formar de cenizas y arcilla. Según el origen de las partículas, podemos diferenciar dos tipos de calima:
- Tipo “A”: Cuando se forma a partir de elementos presentes en el ambiente. En España, es habitual en las Islas Canarias cuando el viento traslada el polvo del desierto del Sáhara.
- Tipo “B”: En los casos cuya causa es la contaminación o incendios forestales. Este tipo de calima se produce principalmente en las grandes ciudades.
Efectos de la calima para la salud
La calima empeora la calidad del aire y reduce la visibilidad, dando un tono amarillento o anaranjado al cielo. Sus efectos sobre la salud están relacionados con problemas respiratorios e irritación de las mucosas. Sus síntomas más habituales son los siguientes:
- Picor e irritación en los ojos.
- Obstrucción nasal.
- Tos.
- Si la calima persiste, pueden aparecer pasados unos días broncoespasmos, dolor torácico y asma.
Consejos para proteger tus ojos de la calima
La irritación en los ojos es uno de los síntomas comunes, ya que las partículas secas que están en suspensión producen sequedad al entrar en contacto con las mucosas. Para cuidar la salud ocular, desde el Instituto Oftalmológico Fernández-Vega recomiendan usar gafas, incluso de sol y también una gorra de visera. Al llegar a casa, si la sensación de arenilla es muy intensa, es conveniente lavar con suero fisiológico los ojos. Las lágrimas artificiales refrescan, alivian y eliminan el polvillo retenido en la lágrima.
Los expertos del centro también explican que el suero fisiológico se puede emplear para lavar tanto la boca como las vías nasales, que también se ven afectadas con este polvillo del desierto. Para evitar respirarlo, se aconseja llevar mascarilla. Además, si la irritación no remite en unos días, lo principal es acudir cuanto antes a un oftalmólogo.
Si quieres conocer más sobre estas recomendaciones y poder aclarar dudas, te proponemos un oftalmólogo especialista del Instituto Oftalmológico Fernández-Vega. Puedes ponerte en contacto con nosotros aquí.
