El daño que ocasiona el glaucoma en el nervio óptico es irreversible, por eso los tratamientos de esta enfermedad ocular, una de las más graves, se centran en frenar su progresión; un objetivo al que también puede contribuir la alimentación.
El factor de riesgo modificable más importante a la hora de desarrollar glaucoma es el incremento de la presión intraocular (PIO). El ojo produce humor acuoso de forma constante.
¿Cómo se trata el glaucoma? Es una pregunta muy frecuente en las consultas oftalmológicas y lo cierto es que depende de cada paciente y del estado en el que se encuentre la enfermedad.