¿Te pican mucho los ojos? ¡Descubre por qué y cómo evitarlo!

Que el champú se te meta en los ojos no es la única explicación de por qué te acaban picando los ojos al final del día. Tampoco que hayas estado cortando cebollas o no te hayas lavado bien después de cocinar con picante… ¡Convivimos con un montón de situaciones potencialmente dañinas para nuestra salud ocular! Trabajamos demasiadas horas delante de pantallas, nos tocamos la cara sin habernos lavado las manos o, incluso, a veces hacemos un uso incorrecto de las lentes de contacto. ¿El motivo? Las prisas, el descuido o el hábito.

El picor de ojos es una sensación asociada a síntomas como la visión borrosa o el enrojecimiento. ¿Te resulta familiar? La irritación ocular puede ocurrir por motivos tan diversos como la alergia, la fatiga visual, o el ojo seco. En general, nuestros órganos de la vista necesitan más mimo y atención de la que habitualmente les préstamos. ¿Por qué? El ojo tiene sus propias barreras para impedir que lleguen agentes infecciosos a su interior, pero, en algunas ocasiones los microbios pueden llegar a atravesar estos mecanismos de protección hasta ocasionar una infección ocular. Es el caso, por ejemplo, de la conjuntivitis, otro episodio bastante habitual capaz de provocar picazón. ¿Quieres conocer con mayor profundidad cuáles son las causas más frecuentes del picor de ojos? ¡Continúa leyendo! En este artículo te vamos a explicar todo lo que necesitas saber.

¿Por qué pican los ojos? Causas frecuentes

¿Qué es lo primero que haces cuando te pican los ojos? Lo más probable es que tengas el impulso de frotarte para aliviar la sensación de irritación ocular. ¡Error! Lo único que conseguimos con esto es empeorar la situación. El picor de ojos tiende a estar vinculado al flujo de un líquido diferente a las gotas que segrega la glándula lagrimal. Y son muchas las razones que pueden dar paso a esta situación. Por ello, a continuación, vamos a mostrarte cuáles son las causas más frecuentes por la que se te pueden irritar los ojos. Seguramente, en algún momento te han picado por alguna de estar razones. ¿Preparado?

Fatiga visual

Nuestros ojos, como cualquier otra parte del cuerpo, se cansan después de realizar una actividad intensa durante demasiado tiempo. En este caso, el picor en los ojos es la primera muestra de aviso de la fatiga visual, y se suele producir por tres motivos:

• La frecuencia de parpadeo disminuye. Normalmente parpadeamos una media de 18 veces por minuto, pero cuando estamos muy concentrados en algo, esto puede disminuir ¡hasta una media de tres veces por minuto! Así, se genera menor lubricación en el ojo y aumenta la sensación de sequedad, ocasionando el picor.
• Estrés en la musculatura del ojo. Al concentrar la vista en algo a corta distancia forzamos los músculos que sujetan al cristalino. Esto fomenta la tensión en la zona ocular, provocando la fatiga y el picor.
• Exposición a muchas pantallas. Hemos normalizado convivir con una excesiva iluminación digital, pero esto tiene un gran impacto en nuestra salud ocular.

Sequedad u ojo seco

La sequedad en los ojos se produce cuando no se consigue humedecer convenientemente el globo ocular. El picor, la irritación o el enrojecimiento se producen cuando se altera una de las capas de la película lagrimal. ¿Y a qué puede deberse este fenómeno? Pues, por ejemplo:

• Al ambiente seco.
• Al humo del tabaco.
• Al uso del aire acondicionado.
• A la exposición al sol.
• A la ingesta de ciertos medicamentos.

Si esto ocurre de manera habitual es importante acudir al oftalmólogo, pues puede tratarse del síndrome del ojo seco. Esta afección oftalmológica, que perturba de forma continuada la calidad visual, requiere diagnóstico, tratamiento y un seguimiento personalizado.

Alergias

Picor ocular, ojos llorosos… si tienes alguna alergia lo sabrás: los ojos sufren mucho cuando entramos en contacto con un agente alérgeno. Esto se produce cuando entramos en contacto con la sustancia en cuestión (polvo, polen, ácaros, elementos animales son las más comunes), y nuestros ojos reaccionan intentando expulsarlo.

Para el correcto tratamiento es imprescindible localizar el alérgeno. Después se puede tratar con antihistamínicos o incluso con corticoides. Es importante estar pendiente de cómo evoluciona, pues esta reacción ocular podría generar en una conjuntivitis alérgica.

Irritación

Hay muchas sustancias que, aunque no nos produzcan alergia, también pueden generar picor en los ojos. El cloro de la piscina, algunos aceites o espuma de champú o de jabón son los ejemplos más habituales. ¡Por eso es tan importante mirar bien la etiqueta antes de comprar productos que potencialmente puedan entrar en contacto con los ojos!

Si te ocurre, lávate inmediatamente los ojos, idealmente con lágrimas artificiales o toallitas estériles, pero si no tienes a tu alcance en ese momento, también puedes usar agua. Y, como siempre, acude a tu oftalmólogo si las molestias no desaparecen.

Tratamiento para el picor de ojos

Dado que el picor de ojos es algo tan habitual, te dejamos los remedios más efectivos y sencillos para solucionarlo:

• Desinfecta la zona ocular. Te recomendamos que lo hagas varias veces al día, por ejemplo mañana, tarde y noche, usando agua tibia y enjuagues de manzanilla o cola de caballo.
• Aplica frío. El frío es un buen remedio para el picor de los ojos, puedes hacerlo con compresas frías, bolsas de té o rodajas de pepino, ¡como en las películas! Ten en cuenta que es necesario mantener la zona fresca durante un rato para reducir la inflamación.
• Date suaves masajes. Puedes usar una crema hidratante o aceite apropiado para la zona ocular, y masajéate suavemente para relajar la tensión en el contorno de los ojos, párpados, cejas y alrededor de las orejas.

Si nada de esto te alivia o el picor de ojos es muy agudo, es importante acudir al oftalmólogo para recibir la atención y tratamiento adecuados.

Prevenir el picor ocular

La mejor manera de prevenir el picor ocular es detectando las causas que lo produce y creando hábitos saludables para evitarlo.

• Asegúrate de trabajar con la iluminación adecuada
• Si pasas mucho tiempo mirando a corta distancia, prevén la fatiga visual con la regla 20-20-20: Cada 20 minutos mira a una distancia de 20 pies (6m) durante 20 segundos.
• Puede ser útil usar gotas como lágrimas artificiales para prevenir la sequedad y ayudar a evitar el picor.