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Tengo un lunar en el ojo. ¿Debería preocuparme?

Lunares, pecas, manchas… todo el mundo tiene irregularidades en la piel. Según su forma y tamaño, a algunas personas les gustan y los consideran una forma de belleza que les hacen únicas, y otras preferirían quitárselos.

Por supuesto, en algunos casos sí que es imprescindible extirparlos porque pueden ser dañinos para la salud y desarrollar complicaciones en la piel. Pero, por lo general, esta pigmentación es perfectamente inofensiva y simplemente nos recuerda nuestra individualidad.

Pero ¿sabías que también pueden salir lunares en los ojos? Estas pecas, también llamadas nevi oculares, funcionan exactamente igual que las de la piel. Pueden ser marcas de nacimiento o desarrollarse con el paso de los años y, normalmente, son benignas y no deben preocuparnos.

Si de repente te has despertado con un lunar en el ojo que antes no estaba ahí, no te preocupes: a continuación te contamos todo lo que tienes que saber sobre ello para tenerlo bajo control.

¿Qué es un lunar en el ojo o nevus ocular?

Como comentábamos, un lunar en el ojo funciona igual en el resto del cuerpo. Se trata de una formación de células llamadas melanocitos que producen melanina, el mismo pigmento que da color a nuestro pelo, ojos y piel.Aunque lo habitual es que estas células se distribuyen de manera homogénea por todo el cuerpo, cuando se agrupan forman un lunar, y, en este caso, un nevus ocular.

Igual que ocurre con las manchas en la piel, puede haber una relación entre la exposición a los rayos del sol y la aparición de los lunares en los ojos. Por eso, es importante tomar las medidas necesarias para proteger los ojos, como el uso de gorras, sombreros o viseras, de lentes fotocromáticas, la preferencia por la sombra, y, por supuesto, no mirar nunca directamente al sol.

Tipos de lunares en el ojo y síntomas que provocan

Los nevi oculares se puede clasificar de varias maneras según el criterio. Por ejemplo, según su localización, pueden ser:

  • Nevus externo: situado en la zona del iris o de la conjuntiva
  • Nevus interno: aparece debajo de la retina, en la capa de las coroides, con lo que también se puede llamar nevus Este tipo de lunares puede ser de colores muy variados.

A su vez, otra tipología es según su naturaleza e impacto en la salud, donde hay que contemplar varias posibilidades:

Nevus benigno

Como el nombre indica, se trata de un lunar en el ojo que no presenta ningún riesgo para el bienestar del o la paciente. Este es el tipo de nevus ocular más común, pero desde que se detecta conviene acudir a revisiones oftalmológicas de manera periódica para evitar complicaciones.

En general, los lunares oculares no presentan ningún síntoma, pero hay que vigilar que no experimenten cambios de forma o de color y que no crezcan de tamaño.

Melanoma ocular

Si el nevus ocular benigno se convierte en un melanoma, es urgente tratarlo para evitar mayores complicaciones. El melanoma es uno de los tipos de cáncer más agresivo y puede acabar afectando a todo el ojo con consecuencias muy graves que pueden ir desde el desprendimiento de retina hasta la ceguera total.

Nevus de Ota

Este tipo de lunar ocular se trata de una afección muy peculiar que puede trascender la zona del ojo, llegando a la piel en torno al ojo o, incluso, al párpado y a la boca. El origen es el mismo que el resto de lunares, pero normalmente se trata de manchas marrones azules o grises que se pueden extender por la zona.

En algunos casos se ha visto una relación entre el nevus de Ota y el aumento del riesgo de glaucoma o del melanoma intraocular, un tipo de cáncer de ojo.

¿Existe tratamiento para el nevus ocular?

En general, un lunar en el ojo es completamente inocente, pero si se detecta es conveniente ir a revisiones oftalmológicas de manera periódica para mantenerlo bajo control y evitar complicaciones. Es posible que un nevus ocular benigno se convierta en un melanoma cancerígeno.

Si llega este caso, es importante tratarlo inmediatamente para evitar mayores complicaciones. Al ser una zona tan pequeña y delicada, lo más habitual es que se recomiende un tratamiento de radioterapia con placas. En los casos en los que el melanoma es lo suficientemente grande y está perfectamente localizado, se procede a una intervención quirúrgica para extirpar tanto el tumor como parte del tejido sano de la zona.

Lunares en los ojos en niños

Como apuntábamos al comienzo, los nevi oculares pueden aparecer desde el nacimiento o ir desarrollándose con el paso de los años. En ambos casos, no tienen por qué ser dañinos, pero conviene darles seguimiento y mantenerlos bajo control para garantizar que no crecen y se convierten en un peligro para la salud ocular del paciente. Además de acudir a una revisión oftalmológica de manera periódica, conviene revisar en casa el lunar cada cierto tiempo para asegurar que no ha mutado en tamaño, forma o color.

Oftalmología General - Número de colegiado: 333306733