¿Qué es y qué provoca el nistagmo? ¿Puede tratarse?

Las enfermedades más comunes de los ojos están asociadas a la pérdida de visión, como la miopía, el astigmatismo o la presbicia. Pero más allá de estos problemas, hay muchos trastornos de los órganos oculares que también son graves y deben tratarse. Además, es importante reconocerlos para poder diagnosticar y tratarlos a tiempo. (driventheatre.com) Uno de estos casos es el nistagmo, un movimiento incontrolable e involuntario de los ojos que puede dificultar el día a día y generar complicaciones graves.

¿Qué es y cómo se manifiesta el nistagmo?

Como señalábamos, el nistagmo es una afección que genera movimientos involuntarios en los ojos. Estos movimientos, que en muchos casos parecen un ligero temblor, son incontrolables por parte del paciente y pueden ser horizontales (el más común), verticales, oblicuos, rotatorios, o una combinación. Así mismo, también puede variar la amplitud del movimiento, la frecuencia o la intensidad.

Realmente, el nistagmo está más asociado al área de neurología que a oftalmología porque es un trastorno relacionado con el mal funcionamiento de las áreas cerebrales encargadas de controlar el movimiento y no tanto con los ojos en sí mismos.

Tipos de nistagmo

El nistagmo se puede clasificar según su origen, y los efectos, causas y síntomas pueden variar en cada caso:

• Nistagmo congénito, o infantil, aparece ya en los primeros meses de vida. Se trata de un trastorno que afecta a uno de cada cinco mil niños y en la mayoría de los casos es consecuencia de otras enfermedades genéticas como el albinismo ocular u oculocutáneo. Es importante en los pacientes albinos realizar un examen completo de la visión, sobre todo del área macular que frecuentemente se encuentra subdesarrollada.

• Nistagmo adquirido, se da con la edad suele presentarse como consecuencia de otros problemas neurológicos, como por ejemplo una complicación de una operación cerebral o un tumor.

Causas del nistagmo

Hay diversas causas que pueden ser el origen del nistagmo:

• Enfermedades: es la causa más común, sobre todo en los casos de nistagmo congénito. Además del albinismo, puede darse por otras patologías como la aniridia (ausencia del iris), un tumor cerebral o la esclerosis múltiple, por ejemplo.

• Estimulantes: también hay muchos casos de nistagmo no asociados a patologías y que tienen como origen el uso de sustancias o medicamentos. Sin duda, el alcohol es una de las más comunes, pero las benzodiazepinas o los barbitúricos también pueden desarrollar esta enfermedad. A su vez, se ha visto que el consumo de ketamina o de anfetaminas puede estar vinculado a casos de nistagmo.

¿Cómo ven las personas con nistagmo? ¿En qué les afecta?

En los casos de nistagmo congénito, los y las pacientes se acostumbran desde la infancia al movimiento ocular y solo notan cierta visión borrosa. En cambio, las personas que han desarrollado nistagmo en la adultez, sí que manifiestan ver los objetos del entorno temblorosos.

Es muy habitual que las personas con nistagmo coloquen la cabeza en posiciones poco comunes para intentar compensar el movimiento en los ojos. En ese sentido, en muchos casos se pueden desarrollar complicaciones como tortícolis o dolor en las cervicales por la postura forzada.

¿Cómo se cura el nistagmo?

En general, el nistagmo no tiene cura definitiva, aunque en algunos casos congénitos puede mejorar con la edad. Por lo tanto, la única solución es encontrar la terapia adecuada en cada caso para paliar los síntomas en la medida de lo posible.

El tratamiento farmacológico no es muy habitual porque no suele lograr buenos resultados, así que se prefieren otros medios como gafas y lentillas, que corrigen la vista, protegen de la intensidad lumínica y, en el caso de las lentillas, tienen la ventaja de moverse con el ojo.

En las personas donde se ve una evolución positiva del nistagmo, desde oftalmología se puede recomendar someter al paciente a cirugía o inyección de toxina botulínica. El objetivo es desplazar los ojos de la zona más periférica, donde se da el bloqueo, a una posición central que evite, o reduzca el movimiento.

En cualquier caso, dado que el nistagmo es un trastorno tan complejo que afecta a tantas zonas del cuerpo (cerebro, músculos y ojos), el tratamiento a seguir en cada caso se establece por parte de un equipo médico multidisciplinar, y siempre se hace de manera personalizada según el diagnóstico y el cuadro evolutivo de los pacientes.